Silvina Ocampo

 Notas sobre Silvina Ocampo y su obra

Nace el 21 de julio de 1903 en Buenos Aires, siendo la menor de seis hermanas, y muere el 14 de diciembre de 1993 en la misma ciudad. Fue escritora, cuentista y poeta argentina.

    Si bien la vida y obra de Silvina Ocampo se vio atenuada en el campo literario e intelectual por la presencia de: su hermana Victoria Ocampo, su esposo Adolfo Bioy Casares y su amigo Jorge Luis Borges, hoy Silvina Ocampo dentro del canon literario argentino, está siendo leída, estudiada, recuperada. En ella encontraremos una postura subversiva, crítica y transgresora que rompe patrones, donde los roles se intercambian, el espacio/tiempo se subvierte e incluso se borran los límites entre persona/animal.

    Victoria Ocampo funda la revista Sur en 1931 y Silvina forma parte del grupo fundador, aunque sin ocupar un lugar preponderante en las decisiones de los contenidos a publicar. En 1932 conoce a Bioy Casares, con quien se casará en 1940. En 1937 publica su primer libro de cuentos, Viaje olvidado, compuesto por relatos breves, y reseñado por Victoria Ocampo en Sur, donde señaló las marcas autobiográficas de los cuentos y le reprochó el haber "distorsionado" aquellos recuerdos de la infancia. En este libro aparecen los rasgos y temas que caracterizarían su escritura, la cual irá desarrollando y perfeccionando con el tiempo y la experiencia. El título del libro (Viaje olvidado) es también uno de los cuentos, donde una niña intenta recordar el momento de su nacimiento. Los relatos son miniaturas, pequeños pantallazos de la memoria que se ven deformados por la imaginación y la escritura. La metamorfosis, la ironía, las figuras persecutorias, el humor negro, y el oxímoron y la sinestesia recorren estos relatos, con galerías de personajes y contextos interconectados por pasillos y patios de caserones, como por la enigmática presencia de niños ligados al horror y la crueldad como víctimas o victimarios.

    En 1948 publica Autobiografía de Irene, y tras varios años de publicar únicamente poesía (Los sonetos del jardín, Poemas de amor desesperado, Los nombres) volvió al cuento en 1959 con La furia, donde alcanza la plenitud de su estilo y el tratamiento de sus temas.

    En la literatura de Silvina hallaremos reflexiones en torno a la feminidad, como también críticas sobre el lugar de la mujer en la sociedad. Su imaginario femenino nos mostrará diversos mecanismos de creación y deconstrucción del rol y la identidad. Las mujeres en sus obras son múltiples que anulan la visión unidimensional de lo femenino. Asimismo la obra de Ocampo es reconocida por su inagotable imaginación y su aguda atención a las inflexiones del lenguaje y sus retorcidas invenciones. En ella se disfraza su escritura con la inocencia de un niño para nombrar, ya sea con sorpresa o con indiferencia, la ruptura con el cotidiano desde el territorio de lo fantástico. Influida tal vez por el nonsense literario y el surrealismo, del cual abreva durante su formación en pintura y del ámbito artístico en el que se desenvolvió, hace de una experiencia de lectura un multiverso amplio para indagar y explorar.